“El negro es una tonalidad que resulta seductora, enigmática y muy elegante, y tiene multitud de aplicaciones en el mundo de la moda y el diseño de interiores. Dentro de este segundo campo, podemos encontrarla en todo tipo de proyectos y estancias, sin embargo, es en la cocina donde su aplicación resulta más asombrosa“.
Las cocinas negras destacan por su carácter notable y distinguido. Al ser una decisión poco convencional hasta el momento para el diseño de una cocina, el impacto visual que genera es mayor. Una cocina negra transmite personalidad y, por lo general, sensación de elegancia y clase. Además, suelen ser superficies versátiles ya que combinan con muchos materiales y acabados.
Las cocinas que siguen esta tendencia son, además, fieles seguidoras del estilo minimalista. Es decir, con escasos elementos u ornamentos podemos conseguir resultados espectaculares y muy impactantes por sí mismos. Aunque puede resultar una decisión arriesgada a priori, lo cierto que es que los resultados obtenidos pueden ser muy satisfactorios, consiguiendo cocinas sofisticadas y llenas de elegancia.
Acabados
Anteriormente, las tonalidades oscuras se vinculaban sobre todo a estancias con mucha iluminación natural o espacios amplios, sin embargo, el diseño actual apuesta por esta gama cromática en todo tipo de proyectos, estancias y superficies sin importar las dimensiones de las mismas o la cantidad de luz natural disponible. Gracias a las bondades que ofrece a nivel creativo, se adapta perfectamente a los espacios y al diseño, y encaja perfectamente tanto si se aplica en acabado mate o en acabado brillo porque ambas opciones aportan valor al proyecto.
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Fuente: Grupo Grespania