- Este informe destaca la importancia de seleccionar sistemas constructivos que no solo mejoren el aislamiento térmico y acústico, sino que también minimicen el impacto ambiental y las cargas sobre las estructuras existentes.
- En su último entregable, el Clúster de la Edificación recomienda que se empleen sistemas constructivos que utilicen materiales sostenibles, con una larga vida útil y que requieran bajo mantenimiento
Crece la demanda de soluciones industrializadas para la rehabilitación de edificios, pero el mercado tiene muy claras cuáles son sus necesidades y cómo deben ser los sistemas que les den respuesta. Así lo afirma el estudio “Recopilación de soluciones constructivas para la rehabilitación de fachadas y cubiertas”, del grupo de Trabajo Industrialización en la Rehabilitación del Clúster de la Edificación, recientemente presentado.
El informe, que aborda la necesidad urgente de mejorar la eficiencia energética y la sostenibilidad en la rehabilitación de edificios, ofrece una visión integral sobre las soluciones constructivas disponibles en el mercado y su potencial para transformar el sector de la edificación.
“En los últimos años, la rehabilitación de fachadas y cubiertas ha evolucionado, pasando de soluciones meramente estéticas a enfoques que priorizan el rendimiento energético y la sostenibilidad. Este estudio destaca la importancia de seleccionar sistemas constructivos que no solo mejoren el aislamiento térmico y acústico, sino que también minimicen el impacto ambiental y las cargas sobre las estructuras existentes”, manifiesta Dasil Fernandez, responsable de Prescripción de PLADUR y coordinadora de este grupo de trabajo.
Tras recopilar y clasificar las diferentes soluciones constructivas disponibles actualmente en el mercado; analizar y agrupar los sistemas según su tipología, campo de aplicación e intervenciones, se han definido los criterios clave que deben cumplir las soluciones constructivas que se diseñan y fabrican pensando en la rehabilitación de edificios.
Una de las principales conclusiones es que el mercado demanda cada vez más soluciones ligeras y poco invasivas. Los sistemas ligeros ayudan a minimizar las cargas sobre las estructuras existentes y su instalación, de forma industrializada, es crucial para garantizar la integridad de los edificios que se están rehabilitando y asegurar la comodidad de sus habitantes.
“También en rehabilitación tenemos que implementar soluciones constructivas adecuadas a cada tipología de obra y al uso del edificio. Siempre han de tener en común su propósito de mejorar el comportamiento energético del edifico y aumentando el confort de los usuarios”, afirma Dasil Fernández.
Además, el informe recomienda que se empleen sistemas constructivos que utilicen materiales sostenibles, con una larga vida útil y que requieran bajo mantenimiento, alineándose con las tendencias actuales hacia la reducción de la huella de carbono y la economía circular.
“No podemos olvidar que la industrialización en la rehabilitación de edificios presenta una oportunidad para optimizar procesos, reducir tiempos de ejecución y mejorar la calidad de las intervenciones, lo que puede transformar el enfoque tradicional de la rehabilitación. Pero es importante que la industria conozca las demandas del mercado y utilice toda su capacidad de I+D+i en dar las respuestas adecuadas”, concluye la coordinadora de este grupo de trabajo.